Es confiable a largo plazo. Sin partes móviles, los sistemas fotovoltaicos fijos duran más que otras fuentes de energía.
Requiere un mínimo mantenimiento.
Cualquier gasto que se haga en la compra o colocación de los paneles solares puede ser fácilmente recuperado: Una vez que un sistema ha pagado por sus costo inicial, la electricidad que produce para el resto de la vida útil del sistema, que es de alrededor de 25 años es absolutamente gratis.